lunes, 3 de octubre de 2011

A un mes de mi llegada.


Es 2 Octubre  del 2011, ha pasado ya un mes desde mi llegada a Corea y en este tiempo puedo decir que muchas cosas han sucedido en mi vida y en mi formación como persona, he podido tener reencuentros con amigos muy queridos que no veía por mas de 3 años, he podido conocer también, muchos nuevos amigos que se duraran para toda la vida.

Un mes que se ha ido "volando", volando fue como llegue a este país la primera vez, emocionado, ilusionado y a la expectativa de lo que pasaría en ese año del 2008 en Corea, volando fue como regrese a este país nuevamente emocionado y con preguntas que me había estado haciendo desde mi regreso a México y que poco a poco se van clarificando y afirmando.

En este mes, he podido recorrer las calles que tanto me gustan, ir a mis lugares favoritos en la ciudad, descubrir nuevos lugares que antes no había podido visitar, pasar los fines de semana solo viajando y experimentando una cultura diferente y extraordinaria, que conocía ya pero no en su totalidad.

Dentro de este regreso a Corea, el adaptarme a la vida universitaria ha sido un reto y desafío emocionante, pero estoy muy agradecido con Dios por su gracia y cuidado en las primeras semanas, por haberme permitiendo conocer personas increíbles que me han ayudado en este tiempo.

El primer mes ha estado lleno de alegrías, recuerdos, emociones, luchas y desafíos, que me han llevado a  ser confrontado por la palabra de Dios y a descubrir debilidades de carácter que aun presento en varios puntos en mi vida y en mi carácter que aun no estaban bien, he sido confrontado a actitudes de egocentrismo y autosuficiencia, que muchas veces de una manera sutil presento.

También Dios me ha recordado que no debo temer a hacer su voluntad, que no debo temer a renunciar completamente a mis deseos y a seguir su voz, confiando en que El hará. No ha sido fácil el ser confrontado, y creo que nunca lo será pero estoy seguro que era necesario para cambiar eso puntos débiles.

Por ahora puedo concluir que en este mes viviendo en Corea Dios ha sido maravilloso, he visto su cuidado en todo momento, su protección y dirección, que es algo incomparable, se que lo que resta de mi tiempo acá seguirá siendo emocionante.

Amigos les pido oren por mi y por los estudios que estoy realizando aquí en Corea, ademas que oren por una actividad que estaré realizando los domingos en la noche en una colonia marginada, apoyando a un amigo que ha comenzado a trabajar con drogadictos, indigentes y prostitutas.

Dios sea con ustedes y seguimos en contacto.

P.D. Es maravilloso conocer a la familia de la IFES en estas tierras y trabajar juntos.





No hay comentarios:

Publicar un comentario