miércoles, 8 de marzo de 2017

La otra realidad de la Tierra Prometida

Desde lejos se escucha siempre que hay una zona de conflicto en Medio Oriente, que todo el tiempo Isr está en amenaza y que injustamente se les esta agrediendo por que conformaron el Estado en 1948. Al menos esa era la percepción que yo tenía porque generalmente así se muestra en los medios de comunicación. Sin duda en muchas ocasiones esto es un hecho real y si sucede así, pero existe otra cara de la moneda la que casi no se menciona y no se percibe cuando uno es turista en Isr porque a los buses de los turistas no los paran al salir del West Bank.


En el tiempo en el lado Isra elí todo es muy tranquilo y aunque se ven militares y jóvenes que hacen el servicio militar en el metro no están todos en servicio y no están haciendo labores militares en las calles; pero cuando uno cruza al otro lado, la situación es contrastante pues desde que uno llega se ven los muros (como el que quiere levantar Trump y que el primer Ministro Isra eli apoya), muros de 12 metros de altura que son movibles en el momento que el país quiera tomar más territorio de P.

 Aquí del otro lado del muro la gente es amable, todos saludan, en el bus te hacen la platica y preguntan de dónde vienes, aquí la gente te hace sentir bienvenida y les da gusto que uno haya tomado la iniciativa de cruzar, y buscan hacerlo sentir bien a uno, aquí muchos no conocen otra realidad porque no se les ha otorgado permiso para salir de su país por otro país que define que se hace con estos ciudadanos, aquí la gente cuenta la otra historia, aquí en el bus hay gente que ha sufrido explosiones por granadas del ejercito que está a cargo de su seguridad y que los incrimina por su origen étnico, aquí de este lado mi guía de turista perdió dos dedos y quedo muy lesionado de los huesos por una granada que los soldados metieron en una bola de tenis y que el tomo cuando era niños, aquí la justicia la hace tu origen y no tus actos.


En nuestra visita a la Ciudad de Heb ron, una ciudad histórica en donde está la tumba de Abraham, y en donde los ciudadanos del país deben pasar puntos de control y en donde se les puede negar el libre acceso a ciertas áreas de su propia ciudad, sucedió un incidente que al grupo de 8 turistas que íbamos nos puso nerviosos, la narración del incidente es la siguiente:

En el recorrido turístico estaba visitar la tumba de los patriarcas que está dentro de la Mezquita de Heb ron, donde hace unos años hubo una masacre llevada a cabo por un judío radical que dejo a más de 15 muertos, justo en la entrada de esa Mezquita el ejercito Isr ha puesto dos puntos de control diferentes, que dificulta el acceso a las personas para realizar sus actividades religiosas.

En el punto de control, que está a la entrada de la M, los soldados pidieron a nuestro guía de origen Palest mostrar su documento de identidad, que el mostro normalmente, después de ello le pidieron que descubriera su chamarra para ver que llevaba, esto como una revisión de seguridad, al abrir la chamarra los oficiales vieron una playera que no fue de su agrado porque decía “Becoming Ungobernable”, por lo cual no le querían dar acceso a la M, por lo que el guía dijo si el problema es la playera me la quito y me dejan pasar, pero los militares Isr no le querían dar la entrada, en una serie de gritos, una de las chicas del ejercito le dijo que tenia que hacer caso a los militares porque ellos tenían el derecho de negarle el acceso y de pedirle que les mostrara la playera, después de una discusión acalorada le brindaron el acceso; llegó nuestro turno para pasar por este punto de control, por lo que todos llevábamos nuestro pasaporte listo para enseñarlo a los militares, pero ellos nos dijeron que no era necesario, a lo que el guía dijo “claro no es necesario porque ustedes no son Pal..”, comentario que no agrado a los militares y lo tomaron de la mano, le empujaron y le querían sacar de la M, sin embargo le llevaron a un cuarto de interrogación. Nosotros nos quedamos ahí, esperando haber que sucedería en ese momento, el militar nos dijo “AMABLEMENTE” que podíamos pasar a la M, pero le dijimos que no lo haríamos sin el guía porque veníamos con él, nos respondió “va a tardar así que ustedes sabrán”, en ese momento otro guía P. se ofreció a darnos el tour dentro de la M, así que decidimos avanzar y 5 min después habían liberado a nuestro guía, exigiéndole no usar la playera dentro del lugar.



¿Por qué narro esta historia?

Porque esta es solo una muestra de lo que vive los ciudadanos Pal. En su día a día, ellos no tienen libertad, la gente en su propio país están siendo limitados a circular por ciertas calles y carreteras por que son exclusivas para la gente de Isr, el sábado nos invitaron a una boda en Pal el recorrido que hicimos de Belen al pueblo de la boda se pudo haber hecho en 2 horas, pero terminamos haciendo 3 y media, porque los P no pueden cruzar la carretera que los llevaría recto y deben dar una vuelta tremenda en una calle llena de curvas, donde me maree por cierto, para llegar al mismo punto.

¿Qué piensas de esta realidad? ¿Qué relación tiene la Biblia con esta situación? ¿Cuál es nuestra responsabilidad cristiana ante estos hechos? ¿Cuál es la visión escatológica adecuada para llevarles el evangelio a los Pal? ¿Cómo hablarle del amor de Jesús a gente que les están limitando tanto? 
¿Debemos como iglesia seguir apoyando un estado que hace esto?

Quizá te sorprenda leer los párrafos anteriores y parece muy crudo, pero esa es la realidad del otro lado de la Tierra Prometida, eso es lo que el Estado que se constituyo en 1948 está haciendo con un país que no es independiente.

Muchos cristianos, me incluyo, hablamos de la situación allá y condenamos a los árabes por lo que está pasando, sin tener una imagen completa de la situación, no estoy diciendo que debemos de ser pro algo, más bien estoy escribiendo esto, con el deseo de animarte a abrir los ojos y meditar ¿Cuál es nuestro deber cristiano ante esta situación? ¿Defender a un Estado ju dio (en teoría, secularizado en la práctica), o mostrar el amor de Jesús a todas las familias de la tierra?


En ocasiones creemos que nuestro deber cristiano es defender y apoyar económicamente lo que el Estado Is está haciendo,  porque nuestra visión escatológica demarca que de este Estado depende mucho del cumplimiento de los últimos tiempos, pero quizá debemos hacer una evaluación profunda de nuestra escatología para poder actuar y vivir de una forma diferente y real nuestra vida cristiana, no solo en este tema, sino en el día a día. Quizá debemos ser más radicales no en la defensa y apoyo a una nación, sino en el amarnos los unos a los otros, más radicales en llevar la luz de Jesús a todo lugar, debemos ser más radicales en ser agentes de paz y no gente que promueve la violencia y el abuso de otros, debemos ser más radicales en nuestro estudio profundo de la Biblia y vivirla de forma real. Debemos dejar que sea Jesús quien nos molde y nos permita ser una voz en medio de donde hay injusticia.

martes, 7 de marzo de 2017

Mi experiencia en la "Tierra prometida"


Hoy voy regresando de Israel después de estar dos semanas en esta nación conociendo la vida y la rutina que mi amada ha tenido por casi dos años. Hoy regreso de esa nación que siempre anhele visitar más que cualquier otra por muchos años. 

Aún recuerdo cuando conocí a mi novia la primera vez, y locamente pensamos en hacer un viaje juntos a Israel, pues ella estaría ese verano trabajando en esta tierra, este viaje se pospuso por diferentes razones, pero sin planearlo ni esperarlo, logramos realizar este viaje que había quedado ahí en sueños, y no lo realizamos como amigos si no como novios.

Estar en Israel ha sido muy desafiante, el recorrer muchos lugares arqueológicos en donde se piensa que sucedieron algunos sucesos Bíblicos es un sentimiento incomparable. Estar ahí en el Valle de Jezreel en la Ciudad de Meguido y ver que dentro de su construcción existen tres periodos de la Historia Bíblica es un sentimiento especial, saber que uno está parado en un lugar donde hace muchos años escritores, que hoy leemos,  vivieron ahí y narran historias que han impactado mi vida por su profundidad de enseñanza.

El tiempo en esta región de Israel para mí fue de las más especiales, pues tuve la oportunidad de conocer a John, fundador de FCSI, una persona que se muestra vulnerable, una persona que con todo su conocimiento y experiencia en la vida cristiana abre su corazón y cuenta sus luchas, que no son para nada sencillas, luchas que me hicieron quebrarme y llorar con él cuando las compartió, aunado a eso él nos llevó a un sitio arqueológico en el valle de Jezreel donde él fue el Arqueólogo encargado de hacer la investigación, las historias de la excavación y de cómo un descubrimiento que él encontró en el último día cambio la forma de medir los tiempos arqueológicos de esta región son historias que solo él puede contar. 

En este lugar vimos esos pasajes de Elias, de Jezabel, de aquellos pasajes que ven venir a los ejércitos de tal lado y era tan palpable la Biblia que me hizo sentir parte de ella y remontarme a aquellos tiempos Bíblicos e imaginar lo que vieron aquellos escritores. 

Dentro de las visitas en la llamada "Tierra prometida" también visitamos Nazareth, aquel lugar donde Jesús creció y vivió sus primeros años, el mar Muerto, el llamado pozo de Abraham, y no podía faltar la visita a Jerusalén, esta ciudad llena de historia y llena de contrastes, esta ciudad donde convergen Judíos, Cristianos y Musulmanes.  

Jerusalén es una ciudad especial por su historia, el recorrido con Terjo (Pastor Luterano) fue increíble, escuchar la historia de un hombre que la ha investigado por años es muy rico, recorrer las calles, las Iglesias y no sólo contemplarlas sino que escuchar la historia oficial y la otra historia fue enriquecedor.

El lugar que más causó un impacto en mi fue la llamada Iglesia del Santo Sepulcro, el sitio es arqueológicamente el más fiable para decir que ahí ocurrió la crucifixión, que ahí está o podría estar la tumba en donde estuvo Jesús, este lugar lleva a meditar en todo lo que implica el Evangelio. Sin embargo, tristemente, también muestra una realidad de la Cristiandad en el mundo entero, pues en este recinto convergen alrededor de 8 Iglesias tradicionales del Cristianismo que se dejan ver en cada una de las capillas que hay en el edificio, cada una con una belleza única y cada una demostrando la comprensión teológica de lo que es una capilla; esta Iglesia tiene en su fachada un elemento cómico pero que deja mucho que pensar, la "Famosa escalera del Santo Sepulcro", nadie sabe su origen, ni quién la puso ahí, pero no se puede remover porque estaba ahí en las primeras fotos que se tomaron al retomar este sitio arqueológico, para poder moverla las 8 Iglesias a cargo deben coincidir en su significado y estar de acuerdo en retirarla, lo cual no sucede en realidad tan fácilmente.

Jerusalén es una ciudad con un ambiente especial, tiene lo moderno de cualquier ciudad del mundo pero tiene esa parte histórica que conecta a todo el mundo en este lugar, esta ciudad te captura y te hace reflexionar en cada recorrido y cada imagen que vez en las calles de judíos caminando por un lado, musulmanes por otro y cristianos por otro. Esta vista general de Israel es muy romántica y muy linda desde el punto de vista cristiano, es algo que vale la pena hacer y visitar en algún momento de la vida.

Sin embargo existe otra realidad que no todos logran percibir tan fácilmente, la realidad de la opresión y la injusticia que impera en esta tierra, hacia una comunidad que vivió en esta tierra por muchos años después de la diáspora judía, existe una realidad que duele y lastima ver como cristiano y seguidor de Cristo, porque esa realidad inconscientemente es apoyada por la Iglesia cristiana en todo el mundo, y condenan a un pueblo que no tiene forma de defenderse ante tanta acusación mediática realizada desde el Estado y desde las empresas. Les invito a leer mi otro escrito sobre este tema.