jueves, 18 de enero de 2018

Carta abierta a la comunidad MUC.

Mis queridos amigos y compañeros de misión.


Quiero tomar un tiempo para escribir unas líneas de agradecimiento por estos años que me han permitido servir a su lado, mis hermanos muchas gracias por abrirme el espacio para poder servir en estos años en El Salvador, gracias mi amigo Olber por ser tan paciente conmigo y por enseñarme a seguir confiando en lo que Dios está haciendo en las personas, gracias a la Junta por respaldar el proyecto y por ofrendarme el boleto de avión a casa el año que no tenía como regresar, gracias estudiantes por enseñarme a ser Pastor y desarrollar está área en mi vida, gracias por ser pacientes conmigo aún cuando cometí errores en el caminar juntos, gracias colegas de misión por las charlas que tuvimos, los sueños que realizamos, las desveladas que nos dimos hablando de el trabajo en la Universidad. Gracias Compa y bella comunidad de la IFES por abrir estos espacios de colaboración, gracias a todos mis ofrendantes que durante estos años me han permitido dedicarme a esto en El Salvador, gracias por creer en la misión en la Universidad y en la misión de Dios. Gracias El Salvador por tu calidez, por tu belleza natural, gracias Pulgarcito de América por acogerme y convertirte en mi hogar por tres años, gracias por que a pesar de tanto dolor que tiene tu historia nos muestras que se puede salir adelante. Y sobretodo Gracias al Padre por todo lo anterior y por su fiel cuidado.

Mis amigos, estos años en El Salvador tuvieron sus momentos increibles, tuvieron sus momentos de temor e inseguridad,tuvieron llanto por la partida de nuestros amigos de misión, pero la constante fue siempre la amistad y el compañerismo que caracteriza al MUC, no hay palabras para agradecer todo lo que han sido estos años y aún no logro articular todo lo que implicó este tiempo en este país; pero lo que si se es que Dios está obrando en El Salvador, que no deben dejar de creer en lo que Él, el Padre, está haciendo, ¿Porque si la Iglesia deja de tener esperanza entonces quien tendrá esperanza? mis amados, Dios no se ha olvidado de esta tierra de guerreros y heroes sin capa, Dios sigue ahi llamando a más generaciones a salir de su comodidad y servir a su comunidad, no dejen pasar la oportunidad que Dios les esta dando de impactar su sociedad y de lograr cambios sustanciales en las áreas requeridas.

Se que en algún momento Dios permitirá que pueda visitar El Salvador y será grato reencontrarme con amigos y compañeros de misión, podre escuchar el avance de la historia de Dios en El Salvador, mis compañeros de milicia que nuestro lema siga siendo lo que arde en nuestros corazones y la oración que surge cada que pisamos un campus Universitario ¡Que venga su reino a la Universidad!.

Podría escribir más pero los sentimientos y la mezcla de emociones no me permiten la claridad que desearía en este momento, pero sepan cada uno de ustedes que estoy muy agradecido con Dios por permitirme ser parte de esta comunidad y por el impacto que ella ha tenido en mi vida, ha sido un privilegio servir en este Hermoso Movimiento Universitario Cristiano de El Salvador, y pronto nos veremos para no perderme la pelicula que se está tejiendo.

Con amor Josue Alanis.