viernes, 5 de febrero de 2010

Fronteras

MAs que Muros...

"Pais de Piedra,Lengua de Piedra.Sangre y memoria de Piedra. Si no te escapas de aqui tu mismo te convertiras en piedra. Vete pronto, cruza la frontera, sacudete la piedra" (La Frontera de Cristal, Carlos Fuentes).

"EL sueño AMericano" un sueño que no muchos quisieron comenzarlo, pero que se vieron obligados a llevarlo acabo. Un sueño que implica mas que "Cruzar al otro lado", ese sueño implica dejar familia, tierra, amigos, tu nacion, Mexico, nacion que no ha sido capaz de generar oportunidades para sus ciudadanos, nacion que es en cierto punto la que obliga a todos aquellos "paisanos" a jugarse la vida en un rio, desierto, tunel, o la forma en que se desea "cruzar".

Cruzar y estar frente a esa barrera o linea entre México-EUA es impresionate, estar frente a ella y saber que solo dando dos pasos, puedes estar en otra parte del mundo, pero que papeles y oficios impiden ese cruce y disfrute de aquello que parece prometedor, es dificil de entenderlo.

El saber que para un Mexicano es tan dificil "cruzar", pero para un estadounidense es solo empujar una puerta, deja mucho que pensar, digo empujar una puerta por que literalmente es (como dice un amigo) "mas dificil entrar a una primaria en la Ciudad de MExico, que entrar al pais", para las primarias te piden identificacion o preguntan que a quien buscas, para entrar a MExico solo giras los barrotes y no hay quien registre ni pida documentos.

Acaso ¿no vale la pena ni si quiera saber quien entra a nuestra nacion? ¿Que Mexico no es tan importante como para protegerlo de todos los delincuentes que pueden provenir de EUA?, no lo se y no lo entiendo, no entiendo que EUA pida tantos requsitos y documentos, y Mexico no exija ni siquiera una identificacion.



2 comentarios:

  1. Veo que tu paso por estas tierras te dejo más que algo...

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  2. Josué muchas gracias por compartirlo. Después de esta experiencia y leerte, logró identificarme y reflexionar en lo vivído y en tus palabras. Sigamos atentos a los fenómenos sociales y como iglesia levantemos la voz y entreguemos el corazón a aquellos que son nuestro prójimo.

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